Y entonces sucedió algo maravilloso: poco sexo y pasión pero sí toda una lección de vida

Quiero hablaros de esta pequeña historia. Transcurre en un pueblo perdido de la mano de Dios, con destino al Camino de Santiago de Compostela. Cuenta la historia de una mujer que llegado a los cuarenta es despedida de su trabajo. Es editoria y se encuentra solo en la vida. Sin trabajo, sin familia...sin nada que le ate a este mundo. En un ataque de nervios, coge el coche y se pierde en el mundo. Y acaba en Nuba, el pueblo perdido de la mano de Dios. 

Allí conocerá a una serie de personajes que le cambiarán la vida y reforzará el amor por los libros, después de conseguir un puesto en una librería de pocas ventas, y de parada obligatoria para los que hacen el Camino de Santiago. También, una mañana  lluviosa, tendrá un encuentro sexual con un fornido hombre de campo, que le hará olvidar todas sus penas. El acto será consumido en varias ocasiones y ella acabará loca de pasión por él. Pero la trama de Y entonces sucedió algo maravilloso no gira entorno al sexo ni a la pasión. Gira entorno a las cosas que realmente importan en esta vida y en lo importante que es seguir adelante pese a que no tengamos a quién irle a llorar. 

La historia se lee con soltura y con ganas. En cada capítulo conocemos libros olvidados e interesantes de la historia de la literatura, y también a sus escritores. Amena, intensa, divertida, apasionante...Y entonces sucedió algo maravilloso es sin duda una perfecta lectura para este verano. 

Poco sexo, poca pasión, pero una lección de cómo seguir adelante pese a todo.